Si las coronas giratorias Franke se acercan al final de su vida útil estimada, el rodamiento se desmonta y se envía a Franke para su inspección. Allí se lleva a cabo una inspección visual inicial y una evaluación de las posibilidades de reacondicionamiento.

Si el estado exterior del rodamiento justifica el reacondicionamiento, se abre el rodamiento y se desmonta en sus piezas individuales. Ya en esta fase, los especialistas de Franke reconocen el potencial de reciclaje existente.

A continuación, se fabrica un nuevo rodamiento de alambres a partir de pistas, elementos rodantes y jaula y se inserta en las piezas de alojamiento existentes. Tras el montaje, el rodamiento se inspecciona de acuerdo con los estándares de calidad actuales y, si es necesario, se somete a pruebas en bancos de ensayo adecuados. Si todas las especificaciones se cumplen con fiabilidad, el rodamiento se devuelve al cliente. Allí puede volver a instalarse y proporcionar movimiento como si nada hubiera pasado.